Buenos días mis entrometidos!!
Hoy no quiero hablaros de ningún producto, herramienta ni utensilio, hoy quiero hablaros del reciclaje. Pero no voy a hablaros de llenar vuestras cocinas con quince cubos de basura sino del reciclaje de la ropa.
Ahora mismo nos encontramos en temporada de cambio de armario y es el momento perfecto para ponernos a evaluar nuestras pertenencias y decidir lo que se queda y lo que se va. Yo tengo muchos criterios a la hora de seleccionar la ropa que guardo y la que "tiro", pero mi preferido es "me la quiero poner mañana?" Si me respondo no, se va fuera.
Pero deshacerse o descartar una prenda no significa para nada tirarla a la basura. Yo tampoco soy muy partidaria de echarla a los contenedores habilitados para ropa que hay por la calle. No lo he sido nunca y menos aún desde que vi un reportaje de "Equipo de investigación" sobre lo que hacen con esa ropa y de cómo los que la recogen se lucran a costa de lo que tú les regalas.
Para empezar, si la tela está buena, la puedes usar para crear otra cosa. Yo ahora mismo me encuentro en proceso de reciclaje con unos pantalones premamá que no voy a volver a usar.
Estoy usando las perneras para hacerle unos pantalones largos a mi mayor. La bolsa para la barriga la tengo guardada para practicar con la remalladora y las trabillas y los botones también los tengo guardados para cuando los pueda necesitar.
Yo siempre, siempre, siempre desguazo las prendas para aprovechar todo lo que puedo. Guardo botones, solapas, trabillas, adornos, hebillas... Hay muchas partes de la ropa que no se gastan y que se pueden reutilizar una y otra vez.
Si tienes ropa que te sirve y que está en buen estado pero que no usas porque es sosa, tipo esta sudadera:
Métele la tijera sin piedad!!! Ponle una cremallera, o un cuello, o una capucha.... O simplemente ponle unos adornos con unos relates. Dale otra vida y otra oportunidad.
Otra situación en la que solemos deshacernos de la ropa es cuando ya no nos sirve. En ese caso la primera opción debería ser pasársela a alguien a quien le sirva. Pero si no nos vale esta opción, también podemos reciclarla. Podemos usar la tela para hacer algo más pequeño como estoy haciendo yo con los pantalones premamá. Si es un pantalón que se nos ha quedado corto, lo podemos hacer short, o ponerle un adorno para alargarlo.
Si el caso es un vestido que nos queda estrecho, podemos ensancharlo añadiendo una tira por los laterales con una tela que combine y nos quedará un resultado de lo más original.
Y si la prenda está pasada de moda, muchas veces también la nominamos a abandonar nuestro armario. En este caso sed cuidadosos. La moda es muy cíclica, cada vez las modas vuelven antes y todos nos hemos arrepentido de tirar una prenda que al poco tiempo se ha vuelto a llevar. Yo tengo guardados algunos tesoros noventeros que sé que van a tardar poco en volver a salir del armario.
De todas maneras un cambio de modas no debería ser un problema para los virtuosos de la máquina de coser como nosotros y con un par de retoques la prenda se puede quedar actualizada.
Para resumir, reflexionad mejor en este cambio de armario y os ahorrareis unos dineritos. Que nos gusta mucho comprar pero es más satisfactorio conseguir mucho gastando poco y para eso el reciclaje es la mejor de las herramientas.
Muchas gracias por vuestro comentarios.
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